Profesional con amplia experiencia en estrategias ambientales, corporativas y gestión de proyectos vinculados al medio ambiente. Sabe mejor que nadie acerca de lo que sucede con el planeta, a causa de una problemática de la cual muy pocos toman conciencia: el cambio climático y su impacto. Ella es Alicia Jaramillo.
Utilizando el invernadero como metáfora, se explica el fenómeno del cambio climático, donde las elevadas temperaturas resultan de la retención de calor ocasionada por gases que impiden su liberación. Desde la era Industrial, con la proliferación de combustibles fósiles, se ha producido un aumento significativo de gases de efecto invernadero en la atmósfera. Como consecuencia, experimentamos un continuo incremento de las temperaturas, afectando incluso a las corrientes marinas y generando alteraciones climáticas. Anualmente, se superan los registros de olas de calor, evidenciando la urgencia de abordar este desafío ambiental.
Esencialmente, la responsabilidad está en los seres humanos, en el crecimiento poblacional que demanda más recursos. La expansión de las ciudades resta terreno a múltiples hectáreas de vegetación, las cuales se encargan de absorber el CO2. Adicionalmente, existe un consumo desmedido de objetos de un solo uso o de ‘obsolescencia programada’ rápida, se desechan y generan más basura, un rastro que no se borra. No menos relevante es la tendencia a importar objetos lujosos o innecesarios (tecnología, prendas de vestir, golosinas) de otros países, sin considerar el impacto ambiental de su trayecto. En respuesta, Alicia destaca: ‘Creo que todos compartimos responsabilidad en este sentido, al demandar recursos de diversas partes para nuestro uso diario’.
Las inundaciones y sequías a nivel global nos han obligado a contemplar las consecuencias derivadas de nuestras acciones, siendo apenas la punta del iceberg. Es imperativo actuar de manera inmediata, y aunque el consumo consciente alineado con necesidades y durabilidad es esencial, Alicia nos alerta sobre la gravedad aún mayor: ‘Esto no solo afecta el clima o la temperatura del agua; va más allá de eso, como comenzamos a observar en las noticias y en la sociedad’.
En última instancia, Alicia insta a que los proyectos e iniciativas ‘verdes’ y ‘ecológicas’ trasciendan más allá de simples reconocimientos, fotografías o, según sus propias palabras, ‘farándula’. En cambio, aboga porque se traduzcan en permisos, gestiones y acciones concretas para preservar el medio ambiente. Esto debería ser una realidad tanto en el ámbito público y burocrático como en el ámbito privado.
¡Aprende más de las acciones para mitigar el daño ambiental junto a Alicia en esta nueva edición de «Conversaciones frente al mar»!